cumplidores de sueños.

16/12/12

Champagne supernova.


Es curioso de la cantidad de cosas que puede estar hecha una persona. Ella, por ejemplo, está hecha de momentos, de canciones a medias, de anocheceres en la playa y amaneceres en su cama, de lágrimas y de sonrisas, de su sonrisa. Está hecha de todos esos personajes de historias que me gustaría ser y de todos esos lugares a los que jamás he ido. De finales felices que nunca empezaron, y de principios que no llegaron ni a prólogos. Está hecha de todas esas fotografías que un día quemé esperando que los recuerdos ardieran con ellas. De domingos que soñaba que eran sábados, y de ese lunes especial que un día cambió mi vida. Está hecha de personas, y de promesas, promesas que nunca se cumplieron. Y, por suerte o por desgracia, está hecha de él.
Él, sin embargo, esta hecho de besos de personas equivocadas, de noches y anocheceres, de pintalabios rojos y medias rasgadas. Está hecho de caricias y besos en el cuello. De arañazos en la espalda en vez en el corazón. De te quieros de una noche, y te odios de muchos días. Él está hecho de alcohol. Y, al  contrario que yo, él está hecho de muchas, y no solo de mí.